Hace un par de días el equipo de Yo Soy Puebla tuvo la oportunidad de visitar el bello municipio de Xicotepec de Juárez (muy cerca de Huauchinango), en nuestra visita nos hablaron mucho acerca de la leyenda del monje algo muy interesante debido a que existe lugar físico para revivir la misma, el acceso a la casa del monje por la mañana y tarde tiene un costo de 10 pesos y puedes disfrutar de un recorrido rodeado de mucha vegetación, senderos y arroyos para terminar en una estatua que se dice es de San Francisco de Asis sin embargo ustedes tienen la última palabra…siendo muy honesto y saltando el protocolo nos aventuramos a entrar a las 4 de la mañana sin linternas y la experiencia fué increíble, les recomendamos visitarla y conocer más de este bello municipio.
Corría el año de 1958 una familia de apellidos Tejada Vázquez decide establecerse en el bello pueblo mágico de Xicotepec Puebla. De este matrimonio nace un niño, al cual pusieron por nombre Carlos Tejada Vázquez. Se decía que fue un niño muy inquieto, como todo chiquillo de esa edad, tenía muchas cualidades. Una de ellas era su facilidad para pintar, esa era su pasión, poder pintar paisajes. Ya en su adolescencia se dedicó por completo a la pintura, logrando un merecido reconocimiento a su arte. Pasaron los años y como todo joven, el amor llegó a su vida. Se encontraba perdidamente enamorado de una hermosa joven, sin embargo su mayor pasión, el arte le absorbía la mayor parte de su tiempo.
Un buen día decidió buscarla en el lugar donde solía verla pasar, pero su amada estaba en brazos de otro hombre. El joven Carlos sufrió una decepción tan grande, que decidió refugiarse en un monasterio. Pensó que con el tiempo se arrancaría ese gran dolor, tan grande que le quemaba el alma pero que eventualmente olvidaría.
Pero eso no fue así, no hallaba consuelo en ningún ni en las palabras de los monjes. Seguía lleno de rabia, y sólo pensaba en vengarse de su amada, arrancándole la vida. Un día regresó a su casa lleno de coraje, se desquitó con sus padres. Ellos intentaron calmarlo, pero parecía que el demonio se había apoderado de su alma. Tomando una espada, cortó la cabeza de sus padres. Asustado por el horrible asesinato que había cometido, decidió sepultarlos en el jardín de la casa.
Horas más tarde, al percatarse de que había quedado sólo y sin amigos, sin nada, triste y arrepentido, en un momento de locura se atravesó la espada en el corazón y puso fin a su vida. Se dice que su alma ronda la casa del jardín por donde pasa un arroyo y cada 4 de octubre gira alrededor de su tumba.
Fotografía y texto del H. Ayuntamiento Xicotepec
Interesante…!!
ok muy buena!
AM ESTA PADRISIMA Y SI QUE DA MIEDO MUXO…
ahh jeje sta geniial star ahi 🙂 (Y)
muy conmovedora historia!