La importancia histórica del inmueble donde hoy descansa Casa real Poblana se remonta a mediados del siglo XVI, teniendo como primer dueño de la morada al clérigo Juan Fráncisco quien la vendería a dos conquistadores: Don Alonso Galeote, célebre por haber comandado uno de los bergantines que conquisto Tenochtitlan, y Antonio Reinoso, casado con Doña María de Elejalde, hija del famoso Juan Ochoa de Elejalde.
Años más tarde el recito pasaría a manos de Don juan Ramírez de Arellano, quien se casaría con la hija de los Rodríguez de la Magdalena y Blandiánez de Villapadierna, Doña María de Mercado y León.
Durante la época colonial poblana el espacio fue donado por Doña Isabel de Villanueva Guzmán para que se erigiera el nuevo convento de Santa Clara.
Durante la exclaustración de los conventos, producto de las leyes de las Leyes de Reforma fueron rematados los bienes. De primera mano se pensó en usarlos como posada para las viudas de la batalla contra los franceses, sin embargo, por las difíciles circunstancias de la guerra el gobierno se vio obligado a rematar el edificio al Cónsul galo Julio Ziegler quien lo fracciono para su venta, lo que permito que se construyera la residencia que hoy conocemos.
La casta Vidals Cisneros fue el siguiente grupo que habito la morada, lo cual no fue por mucho tiempo ya que eran las fechas en que los Hermano Serdán buscaban su lugar en la historia, por lo que los Vidals prefirieron venderla a la Señora María Adriana Camacho de Orozco quien la tuvo por poco más de sesenta años, hasta que fue adquirida por la familia Vergara Murad quienes convirtieron al lugar en el espacio pionero del buffet en la ciudad llamándolo Casa Real Poblana.
Cónoce la bella Casa Real Poblana en el corazón de la ciudad de Puebla y disfruta de su historia y buffet en: 4 Oriente No. 208, colonia Centro.
Hola y en cuanto está el bufete?
Cuanta historia! Amo mi ciudad!
Cuanta historia! Amo mi ciudad!